Decoración tradicional con estética moderna
Una reforma recuperó la calidez y funcionalidad de un departamento racionalista borrando sus límites con el verde.
La recepción continúa visualmente en un gran patio que ingresa al interior por el juego de espejos, luces y ventanales.
Mesa comprada en San Telmo -típica de café porteño- con sillas clásicas (Thonet).
Entre el living y el comedor, un bar de mampostería entelado en cuero negro con tapa de granito, nariz de madera y fajas de acero.
Tras derribar paredes de mampostería que formaban los boxes de atención y recuperar los cielos rasos de 4 metros de alto, se revistió el piso con madera de lapacho para ganar calidez y unificar los ambientes. Otra idea fundamental fue diseñar todos los cuartos en función de los patios internos para que se borrara el límite con el afuera .
Banquetas de cuero color crudo, mesa ratona y sillas de esterilla ubicadas para disfrutar de la chimenea flanqueada por dos bibliotecas de vidrio .
La chimenea de hierro realza su carácter por la liviandad del vidrio que la rodea y el verde que ingresa del exterior .
"Queríamos que los ambientes ventilaran a patios y tuvieran mucha luz y proyección". Para eso colocaron grandes ventanales y revistieron una pared con bloques de cemento que continúa afuera. "Los nichos, con sus luces y sombras, y los espejos que parecen ventanas son nuestros preferidos".
La mesa de guindo con lustre a muñeca y sillas tapizadas con Madrás son un diseño del estudio. A tono con la paleta de colores, una obra de Zulema Maza .
El comedor está en el acceso, algo bastante inusual. Con el fin de darle más protagonismo, se realizó un desnivel revestido con laja esmaltada.
Al estar ubicado en una planta baja, los patios de este departamento cobraron enorme relevancia.
La cocina es íntegramente blanca, con pisos y paredes de porcelanato pulido. Los muebles están laqueados y las mesadas son de Silestone
Mesa de caño color acero y tapa de MDF, diseño de los arquitectos, y sillas plegables generan el comedor diario, envuelto en un cálido verde
Grandes plantas verdes ubicadas en las paredes medianeras dan la sensación de amplitud sin invadir el espacio. Un punto aparte merece la iluminación. Al contar con nichos, espejos y ventanales que dan luz natural, se pudo jugar con los artefactos y generar distintas sensaciones a cada hora del día.
En el cuarto de los niños, alfombra de goma para jugar en el piso y almohadones y acolchados que aportan color.
"En el living la iluminación es puntual para cuadros y difusa para destacar los nichos. En las bibliotecas está desde arriba y en el bar es difusa sobre las botellas" .
Al final, todo se conjuga para lograr el efecto deseado: "Tenemos una casa muy divertida y funcional".
Mesa de luz colonial con tapa de mármol comprada en la tradicional casa de remates Breuer Moreno
Para dar una mejor proporción al ambiente en el dormitorio principal se bajó el cielo raso y se hicieron molduras nuevas que siguen con el estilo racionalista.
El baño de los chicos, con guarda vertical de acero y vidrio color transparente y gris que le da una terminación visual similar a las venecitas.
La planta tiene 22 metros de profundidad por 11 metros de ancho o frente
La recepción continúa visualmente en un gran patio que ingresa al interior por el juego de espejos, luces y ventanales.
La obra del Estudio Ros Artayeta bien puede compararse con una delicada cirugía estética. No sólo porque donde hoy habita un matrimonio con cuatro hijos antes funcionaba una fría clínica de belleza, sino porque con las reformas le devolvieron la identidad (racionalista) que originalmente tenía este departamento en planta baja.
Mesa comprada en San Telmo -típica de café porteño- con sillas clásicas (Thonet).
Entre el living y el comedor, un bar de mampostería entelado en cuero negro con tapa de granito, nariz de madera y fajas de acero.
Tras derribar paredes de mampostería que formaban los boxes de atención y recuperar los cielos rasos de 4 metros de alto, se revistió el piso con madera de lapacho para ganar calidez y unificar los ambientes. Otra idea fundamental fue diseñar todos los cuartos en función de los patios internos para que se borrara el límite con el afuera .
Banquetas de cuero color crudo, mesa ratona y sillas de esterilla ubicadas para disfrutar de la chimenea flanqueada por dos bibliotecas de vidrio .
La chimenea de hierro realza su carácter por la liviandad del vidrio que la rodea y el verde que ingresa del exterior .
"Queríamos que los ambientes ventilaran a patios y tuvieran mucha luz y proyección". Para eso colocaron grandes ventanales y revistieron una pared con bloques de cemento que continúa afuera. "Los nichos, con sus luces y sombras, y los espejos que parecen ventanas son nuestros preferidos".
La mesa de guindo con lustre a muñeca y sillas tapizadas con Madrás son un diseño del estudio. A tono con la paleta de colores, una obra de Zulema Maza .
El comedor está en el acceso, algo bastante inusual. Con el fin de darle más protagonismo, se realizó un desnivel revestido con laja esmaltada.
Al estar ubicado en una planta baja, los patios de este departamento cobraron enorme relevancia.
El pulmón central ocupa todo el ancho de la casa y está dividido en dos partes: una que vincula visualmente con la recepción y tiene deck de madera y pared de bloques de cemento y otra más amplia, con baldosones del mismo material.
El segundo se ganó al tirar una pared divisoria con loza y se unió a la cocina.
La cocina es íntegramente blanca, con pisos y paredes de porcelanato pulido. Los muebles están laqueados y las mesadas son de Silestone
Mesa de caño color acero y tapa de MDF, diseño de los arquitectos, y sillas plegables generan el comedor diario, envuelto en un cálido verde
Grandes plantas verdes ubicadas en las paredes medianeras dan la sensación de amplitud sin invadir el espacio. Un punto aparte merece la iluminación. Al contar con nichos, espejos y ventanales que dan luz natural, se pudo jugar con los artefactos y generar distintas sensaciones a cada hora del día.
En el cuarto de los niños, alfombra de goma para jugar en el piso y almohadones y acolchados que aportan color.
"En el living la iluminación es puntual para cuadros y difusa para destacar los nichos. En las bibliotecas está desde arriba y en el bar es difusa sobre las botellas" .
Al final, todo se conjuga para lograr el efecto deseado: "Tenemos una casa muy divertida y funcional".
Mesa de luz colonial con tapa de mármol comprada en la tradicional casa de remates Breuer Moreno
Para dar una mejor proporción al ambiente en el dormitorio principal se bajó el cielo raso y se hicieron molduras nuevas que siguen con el estilo racionalista.
El baño de los chicos, con guarda vertical de acero y vidrio color transparente y gris que le da una terminación visual similar a las venecitas.
Deck de lapacho con mesa del mismo material, delimita el living, que se completa con fiacas de cuerina, almohadones tejidos.
La planta tiene 22 metros de profundidad por 11 metros de ancho o frente
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