Edificio Rua Simpatía - Grupo SP
Densidad y Vacío
La ciudad de São Paulo se caracteriza por la densa ocupación que niebla la percepción de su topografía original; son pocos los espacios desocupados, especialmente los que se definen y configuran a partir de su terreno original, debido a los fenómenos geográficos.
Uno de los retos para los arquitectos en este siglo es la construcción de estos espacios vacíos, haciendose cargo de sus dimensiones para la convivencia en medio de nuestra ciudad. Este edificio forma parte del desafío.
Construcción de los levantamientos
El edificio hace uso de la topografía típica de valle, existente entre la calle Simpatía - en el nivel más alto – y la calle Medeiros de Albuquerque – en el nivel más bajo – definiendo la ocupación en dos bloques: uno superior y aéreo que forma el espacio residencial y otro inferior y arraigado – para los servicios y estacionamientos. Entre estos dos bloques: un espacio, una losa libre a la que se accede a través de una pasarela que permite pasar sin obstáculos al otro lado del valle.
Movimiento en el espacio: caminar entre los árboles
Al quedar sobre el patio inferior, las copas de los árboles frutales de estos jardínes quedan al nivel de los que circulan por el patio de acceso, lo que genera un atractivo en este pasaje y la posibilidad de sacar frutas.
Una vez pasada una puerta transparente, el espacio no está cerrado, al contrario, permanece abierto hacia las vistas y hacia un espejo de agua que marca un espacio vacío en el centro del edificio, hacia donde abren los ascensores y las escaleras. En el extremo se dispuso una sala de uso común para los residentes, para fiestas o reuniones, desde donde se accede además a la piscina ubicada en el patio inferior.
Departamentos como una expresión de los residentes
Los departamentos son espacios vacíos: planta libre, donde los residentes pueden armar los ambientes de acuerdo a sus necesidades y gustos. Éstos están organizados en dos bloques contrapuestos, Simpatía y Medeiros, con una configuración arquitectónica y puntos de vista diferentes pero con la misma flexibilidad de ocupación de acuerdo a los usuarios.
Esta diversidad se expresa en la aleatoriedad de las aberturas en los lados norte y sur destacando la singularidad de cada departamento. En los lados este y oeste, planos de vidrio de la extensión de las unidades marcan la presencia del edificio en el paisaje urbano que a su vez, inunda el ambiente de luz.
Espacio de Convivencia
El bloque de circulación vertical (escaleras y ascensores) se abre a balcones que dan hacia el espacio vacío interior, como una continuación del patio de acceso. Al lado de cada unidad aparece un espacio agradable que acompaña la entrada de cada una de ellas; un espacio de encuentro, para compartir.
Gentileza urbana
En el patio inferior la piscina se dispone sobre el nivel de tierra, bordeando el jardín junto a la calle Medeiros y una vez más se establece una relación con la copa de los árboles. Bajo esta estructura, con acceso al subterráneo, se encuentra una lavandería que se abre hacia el jardín.
Finalmente, al evitar las rejas se ofrece a la ciudad un banco, un árbol, una pequeña plaza para el barrio. Implementar un edificio residencial en este lugar es una construcción de la topografía y el vacío. Un diseño para “habitar en la ciudad”.
Arquitectos: Alvaro Puntoni, Grupo SP, João Sodré, Jonathan Davies
Año de la Obra:2011
Área construida:820 m²
Ubicación: São Paulo, Brasil
Fotógrafo: Nelson Kon
La ciudad de São Paulo se caracteriza por la densa ocupación que niebla la percepción de su topografía original; son pocos los espacios desocupados, especialmente los que se definen y configuran a partir de su terreno original, debido a los fenómenos geográficos.
Uno de los retos para los arquitectos en este siglo es la construcción de estos espacios vacíos, haciendose cargo de sus dimensiones para la convivencia en medio de nuestra ciudad. Este edificio forma parte del desafío.
Construcción de los levantamientos
El edificio hace uso de la topografía típica de valle, existente entre la calle Simpatía - en el nivel más alto – y la calle Medeiros de Albuquerque – en el nivel más bajo – definiendo la ocupación en dos bloques: uno superior y aéreo que forma el espacio residencial y otro inferior y arraigado – para los servicios y estacionamientos. Entre estos dos bloques: un espacio, una losa libre a la que se accede a través de una pasarela que permite pasar sin obstáculos al otro lado del valle.
Movimiento en el espacio: caminar entre los árboles
Al quedar sobre el patio inferior, las copas de los árboles frutales de estos jardínes quedan al nivel de los que circulan por el patio de acceso, lo que genera un atractivo en este pasaje y la posibilidad de sacar frutas.
Una vez pasada una puerta transparente, el espacio no está cerrado, al contrario, permanece abierto hacia las vistas y hacia un espejo de agua que marca un espacio vacío en el centro del edificio, hacia donde abren los ascensores y las escaleras. En el extremo se dispuso una sala de uso común para los residentes, para fiestas o reuniones, desde donde se accede además a la piscina ubicada en el patio inferior.
Departamentos como una expresión de los residentes
Los departamentos son espacios vacíos: planta libre, donde los residentes pueden armar los ambientes de acuerdo a sus necesidades y gustos. Éstos están organizados en dos bloques contrapuestos, Simpatía y Medeiros, con una configuración arquitectónica y puntos de vista diferentes pero con la misma flexibilidad de ocupación de acuerdo a los usuarios.
Esta diversidad se expresa en la aleatoriedad de las aberturas en los lados norte y sur destacando la singularidad de cada departamento. En los lados este y oeste, planos de vidrio de la extensión de las unidades marcan la presencia del edificio en el paisaje urbano que a su vez, inunda el ambiente de luz.
Espacio de Convivencia
El bloque de circulación vertical (escaleras y ascensores) se abre a balcones que dan hacia el espacio vacío interior, como una continuación del patio de acceso. Al lado de cada unidad aparece un espacio agradable que acompaña la entrada de cada una de ellas; un espacio de encuentro, para compartir.
Gentileza urbana
En el patio inferior la piscina se dispone sobre el nivel de tierra, bordeando el jardín junto a la calle Medeiros y una vez más se establece una relación con la copa de los árboles. Bajo esta estructura, con acceso al subterráneo, se encuentra una lavandería que se abre hacia el jardín.
Finalmente, al evitar las rejas se ofrece a la ciudad un banco, un árbol, una pequeña plaza para el barrio. Implementar un edificio residencial en este lugar es una construcción de la topografía y el vacío. Un diseño para “habitar en la ciudad”.
Arquitectos: Alvaro Puntoni, Grupo SP, João Sodré, Jonathan Davies
Año de la Obra:2011
Área construida:820 m²
Ubicación: São Paulo, Brasil
Fotógrafo: Nelson Kon
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